OTRO MÁS

 

Éramos pocos y parió la abuela. Pronto podemos pasar a tener seis partidos con implantación nacional. Este surge por la izquierda y con ánimo de contrarrestar el empuje de la derecha.

Lo promueve Gaspar Lllamazares y quiere incorporar al exjuez Baltasar Garzón, criticando de paso al otro Garzón, Alberto, ese vergonzante vendedor de unas siglas que alojan al histórico Partido Comunista, que siempre estuvo lejos de populismo y nacionalismos, que se mantenía fiel a postulados internacionalistas.

Llamazares es un hombre serio que se expresa y actúa con sensatez; el juez prevaricador tiene un pasado lleno de episodios confusos y es muy dado a moverse entre bambalinas.

Ya veremos si encuentran un espacio propio.

Brindan el chiste fácil de pedirles que busquen a un Melchor (podía ser Melchor Charlín, viejo conocido de Baltasar), se llamen Reyes Magos y se presenten el seis de Enero.

 

 

PUJANTE

 

La muerte es siempre cruel pero unas veces más que otras, sobre todo cuando es inesperada y temprana como ha ocurrido con José Antonio.

Mostró una inequívoca vocación política que empezó a materializar siendo estudiante de Filosofía.

Militó siempre en IU y con energía, haciendo honor a su apellido, esa IU que alguien entregó después de modo vergonzante al populismo.

Durante una legislatura fue el único diputado de su partido pero actuó como si fuera un grupo completo, fajándose contra todos con eficacia y brillantez.

Ha sido un buen parlamentario, un buen político, un buen profesor; derivado todo del hecho básico de que era una buena persona y proyectaba esa calidad humana en los diferentes espacios que ocupaba, privados o públicos.

Permanecerá en el recuerdo de quienes lo conocieron.