EL FUEGO

Heráclito (VI a.C.) lo consideraba elemento constitutivo y primigenio de la realidad(“este cosmos ha sido, es y será fuego eterno”)..A lo largo de la Historia nos ha proporcionado calor, luz, intimidad, compañía, ha sido centro de reunión y convivencia- la palabra “hogar”significa el lugar donde está el fuego- que servía para transmitir conocimientos y crear tradición. Ocasionalmente también ha causado dolor y tragedias.

Hoy es una especie de arquetipo del inconsciente colectivo que nos conecta con ese pasado. Quedarte junto al fuego sin más luz que la de la llama amarilla es una experiencia impagable, un buen ejercicio de introspección.