84 años, rodeado de procesos judiciales, habiendo pisado la cárcel, vivió y ha muerto instalado en el fraude, implicó a su numerosa familia y estafó a miles de ciudadanos, creó su propia burbuja inmobiliaria y empresarial pero no cumplía ni con Hacienda ni con la Seguridad Social.
Durante mucho tiempo estuvo despreocupado porque sus trapacerías se toleraban en un mundo de corrupción generalizada. Luego empezó a inquietar-incluso a sus correligionarios del Opus-, los bancos le negaban financiación y en 1983 el gobierno decreta una expropiación. Se rebela contra el Sistema, hace el ridículo y reinicia un proceso de estafas múltiples.
Sinceramente, no veo nada ejemplar en el personaje y, desde luego, no se lo propondré como modelo a mis nietos.
Cada vez quedan menos espacios y posibilidades de preservar eso que se supone privativo, relacionado con nuestro interior y que sólo nosotros conocemos. Hay que ser ingenuo para creer que una información que pase a Internet va a permanecer secreta, al abrigo de toda revelación.
El escándalo de Ashley Madison refleja varias cosas: eso de la monogamia estable y romántica es un fenómeno en declive, la mayoría de los adúlteros son hombres (como es lógico en una sociedad machista), España no desmerece ocupando un buen lugar el en ranking y, finalmente, que en mi pueblo hay más de mil casos (¿conoceré yo a alguno?). ¡Qué modernos somos, esto parece Hollywood!
Puro y duro el que practican los países europeos con el fenómeno de la inmigración. Nadie quiere levantar la cabeza y encarar seriamente un problema que se ha agudizado porque a los que huían del hambre buscando pan se han sumado los que huyen del terror buscando paz.
Acongojados por unos informativos que diariamente nos inyectan en vena su ración de tragedia con imágenes- preferentemente de mujeres y niños -pero sólo reaccionamos cuando nos toca de cerca y con medidas ineficaces, paliativas.
El tema es duro y complejo. Precisamente por eso requiere una voluntad decidida y concertada para abordar sus múltiples causas, sabiendo que sólo es posible regular lo inevitable. Cualquier cosa menos mirar para otro lado.
Contemplando la situación- y sin caer en injustificados alarmismos- parece que algunos han logrado crear un clima inquietante, tan tenso como no veíamos hace tiempo.
Se incita a la violencia hablando de bandos y miedos, se producen insultos e incluso agresiones físicas.
En Cataluña políticos incompetentes e irresponsables atizan el sentimiento nacionalista más radical y consiguen dividir a los catalanes y perturbar al resto de los españoles.
Las pasiones, subjetivas e impulsivas, separan; la razón, objetiva y fría, une a través de argumentos y normas.
La próxima campaña no va a aportar calma, convendría evitar crispaciones innecesarias porque todo esto ocurre en un país poco dado a la racionalidad y con una triste historia.
Es un país poco dinámico, apenas industrializado, lleno de jubilados y funcionarios, con abundante gasto y escasos ingresos. Por todo ello se ven abocados al déficit y a la deuda pública. Pero no se sienten responsables de su propia situación y culpan al BCE, al FMI y, cómo no, a Ángela Merkel.
En esa situación crítica aparece uno de esos líderes mesiánicos, entreverados de populismo que comienza a inflar una burbuja en la que mete mentiras, insolencia chulesca (léase Varoufakis), amenazas, exigencias imposibles y así hasta que explota.
Ahora, lejos de buscar amplios acuerdos, ahondan en la división y siguen buscando al enemigo fuera.
Si Astérix los viera diría: “Están locos estos helenos”.
Por fin logró Sancho el gobierno de su muy deseada ínsula, el gran móvil de su vida. Pero pronto comprendió que eso de gobernar vidas y haciendas no era lo suyo y renunció a la tarea.
Tras el 24M han surgido por doquier- como consecuencia de una equivocada política de pactos- gobernadores de baratarias. Los tenemos en Barcelona, Madrid, Cádiz, Valencia, etc; ninguno de ellos más sensato que el buen Sancho y juntos andan destrozando la imagen de España.
Sólo cabe esperar que alguien nos despierte y diga que ha sido un mal sueño, una travesura de un burlón Cervantes y, sobre todo, que los electores, aunque sigan indignados, afinen su voto guiándose por el sentido común.
Parece cosa de magia esto de que una misma palabra tenga varios significados por economizar acaparando. Hay centenares de ejemplos; se me ocurren dos: “Evacuar”, remite a vaciar pero se puede evacuar un lugar desalojándolo, el cuerpo todos los días, consultas diplomáticas cuando surgen problemas, un trámite que es necesario cumplir. “Efectivo”, es un adjetivo que indica algo real, verdadero, también dinero disponible, en metálico pero se impone su empleo como sustantivo plural para designar a los miembros de alguna institución, sin precisar bien su naturaleza (“fueron necesarios 80 efectivos para culminar el trabajo”).
Siempre nos quedará el contexto para precisar el sentido que estamos dando a las palabras polisémicas.
Del inefable y rechazado Wert se llama Iñigo, es aristócrata, pulcro y relamido, católico integrista y experto europeísta.
Su primera medida como ministro de Educación ha sido quitar del despacho el retrato de Unamuno que hizo Solana. ¡Pobre D. Miguel!. En Octubre de 1936 se enfrentó a Millán Astray y estuvo a punto de perder la vida. Ahora, 79 años después, un hijo y nieto de militares africanistas golpistas manda retirar su retrato porque le incomoda su “presencia”, lo tortura su recuerdo.
¿Qué criterios utiliza Rajoy para nombrar ministros de Educación? ¿No podría limitarse a elegir personas normales?.
Es oportuno recordar a Unamuno y deciros: “Mandáis pero no convencéis”.
La estadística lo refleja todo y nos muestra lo previsibles que somos en nuestra forma de vivir y de morir; hay tendencias vinculables con épocas del año.
En verano el mar resulta letal, sea para bañistas intrépidos o, sobre todo, para inmigrantes, ese fenómeno que nadie se atreve a abordar de forma radical (de raíz), racional y global.
En invierno la nieve, la montaña, los deportes de alto riesgo pasan a ser los protagonistas y exigen su cupo. Un segundo capítulo son las víctimas del fuego o el gas en las viviendas.
Como factor estable, a lo largo de todo el año, la carretera va proporcionando cifras semanales del tributo que pagamos al asfalto.
El que ha hecho Rajoy a Wert nombrándolo embajador ante la OCDE un mes después de haberlo cesado como ministro. En Julio se casó con la que era su secretaria de Estado y en Agosto ya vivían en una residencia de lujo en París.
Debe ser un modo de agradecer los servicios prestados a ese inesperado fichaje que llegó al gobierno como la gran esperanza blanca y, si se descuida, lo hunde. Artífice de una ley que, lejos de buscar el necesario consenso, provoca un rechazo unánime. Elevó el IVA cultural hiriendo de muerte al sector.
Como experto en demoscopia ha comprobado lo que el “demos” opina de él y está horrorizado.
El Blog pretende ser un espacio abierto a la reflexión interactiva, propiciar un intercambio de puntos de vista, de valoraciones. La temática es abierta, pluridisciplinar y combina microartículos (en torno a 100 palabras) con otros más extensos.