FIN DEL MANIQUEISMO

Elaborado por Manes en el siglo III, lo explicaba todo en función de la existencia de los principios del Bien y del Mal. En realidad es una característica propia de religiones y dictaduras, que huyen de la complejidad y lo ofrecen todo bien digerido a sus creyentes-súbditos.
Resulta más cómodo vivir instalado en esquemas simplistas, reduccionistas, pero es inútil porque antes o después la realidad y la razón se encargan de aniquilarlos y te llevan a una visión reflexiva, poliédrica.
Hoy es difícil saber quiénes son los buenos o los malos en Siria, Ucrania, Egipto… o las fronteras precisas entre izquierda / derecha, normal/patológico, justo/injusto, etc.

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