Es tópica la expresión de que la política hace extraños compañeros de cama. Por estos lares lo más sonado fue la famosa pinza Aznar-Anguita, ridículos ambos y movidos por un odio común contra Felipe González.
Ahora, digna de figurar en el Guinness, aparece en Cataluña la alianza CDC-CUP, o sea, burguesía de derechas y extrema izquierda, constructores del sistema y antisistema, defensores de la banca (donde guardan lo que roban) y partidarios de nacionalizarla, creyentes y ateos, propietarios y detractores de la propiedad privada, etc.
Imposible imaginarlos redactando un programa común de gobierno.
Pero hoy se tumban en el mismo colchón y se tapan con el mismo edredón.
¿Hay quien dé más?
Desde el esperpento del balcón el dia de la Merçe, que solo faltó Colau diciendo: «Como alcaldesa vuestra que soy….,» espero que alguien suelte La Vaquilla y grite: Todos a la carcel, vamos que he decidido observarlo todo como si viese una pelicula de Berlanga, así no me llevo sofocones, que ya no tengo edad para eso.
Y la feminista de la CUP?, catalana, catalana, con genes muy distintos a los españoles, pero de padre onubense y madre murciana, yo diria que se ha escapado de la familia Leguineche.
Un abrazo
Acertadísima la metáfora de Berlanga porque esto parece una mala mala versión de películas suyas.También podría servir Cuerda y su «Amanece que no es poco» por lo que tiene de surrealista.
A ver si algún día despertamos de este mal sueño.
Gracias por erl comentario.