El presidente murciano por el comportamiento de su partido ante la imputación que se le ha formulado por cuatro delitos.
Han hecho suyo aquello de “a los míos con razón y sin ella”. Militantes, cargos públicos, hasta el presidente del gobierno, opinan que no debe dimitir y confían en su inocencia. Además, ahora es avalado masivamente para ocupar la presidencia regional del partido En el PP nos tienen acostumbrados a este cierre de filas.
Seguramente en otros partidos habrían surgido discrepancias, voces críticas.
El caso está en manos de un magistrado solvente y sobradamente acreditado que no tardará mucho en dictaminar lo que en justicia proceda y pondrá fin a este episodio tan desagradable y perjudicial para Murcia.