No empezamos con buen pie el mes primaveral.
El inefable Trump, empresario corrupto y putero impenitente, sigue causando estragos con su trasnochado proteccionismo.
Un tribunal alemán de segundo nivel corrige a nuestro Supremo y permite que el secesionismo catalán se anote una victoria simbólica y mediática.
No salen adelante unos Presupuestos beneficiosos para millones de ciudadanos porque lo impiden la insolidaridad nacionalista y la terquedad del nuevo PSOE.
La Universidad sale malparada por el marrullero empeño en amañar un innecesario máster.
El rifirrafe Sofía- Letizia- Leonor termina afectando a la institución monárquica cuyo principal sentido radica en la estabilidad y la capacidad de moderar; pero para cumplirlo ha de ser respetable y respetada.
Vamos que Abril, más que traer aguas mil, trae mil nubarrones.
Esperemos que escampe.