TOLERANCIA
En eso de tolerar, los españoles merecemos un premio, tanto en su acepción de respeto a los demás como en la de soportar y resistir la acción política que padecemos.
Lo del Gobierno es de antología: entre las cosas que hace, las muchas que no hace y las que deja que hagan otros, se convierte en un modelo sin parangón, algo que no figura en los manuales de ciencia política.
Todo queda resaltado al coincidir uno de los peores momentos de nuestra historia reciente con el conjunto de líderes más ineptos de ese mismo período. Calificarlos así no es seguir el tópico de culpar al gobernante (non piove, porco governo); no hay más que observar detenidamente sus conductas. Carecen de sentido de Estado, no ven más allá sus intereses partidistas, son incapaces de dialogar para llegar a acuerdos en temas esenciales y preocuparse por el bien común.
Fernando Martínez Serrano 16-9-20