OTROS TIEMPOS
“Me pongo serio y les digo que si pertenecen a la mayoría no pueden entorpecer un proyecto del Gobierno y que si se empeñan en leer su proposición yo presentaré la cuestión de confianza; si ganan la votación yo dimito y en paz”
¿Se imagina alguien que hoy Sánchez tuviera ese diálogo con el amo de Podemos? Suena a música celestial, a racionalidad y coherencia políticas.
Lo dijo Azaña en Diciembre de 1931 dirigiéndose a los socialistas que formaban parte de su Ejecutivo.
Este que nos semigobierna ahora se autoproclama “azañista” pero no tiene ni idea de lo que está diciendo; debe ser que Redondo le ha sugerido que queda muy bien diciéndolo.
La actividad política está necesitada de recuperar una dignidad que es más necesaria que nunca. Con los líderes que tenemos es una misión imposible.
Fernando Martínez Serrano 4-12-20