Yo creo que el rey mejora con el paso del tiempo y 50 años es una buena edad de sazón.

Su discurso ha sido original, acertado y pertinente, vertebrado en dos ejes: la Constitución en su cuarenta aniversario y los jóvenes; del pasado al futuro sin obviar las dificultades del presente.

Me atreví a “predecir” que no pronunciaría la palabra “Cataluña” y acerté, aunque afirmó que: ”las reglas para todos han de ser cumplidas por todos” y a buen entendedor…

Ha sobrevolado el fragor partidista, como corresponde a un Jefe de Estado garante de la necesaria estabilidad.

Luego vienen las consabidas réplicas que todos tienen preparadas de antemano, sobre todo las más miserables que no son conscientes de que habla para que los hijos de ellos no crezcan con tanto rencor.