Y de muchos aumentos habrá que mirar cada nombramiento para cargo público que haga un partido. Vivimos una época en la que desvelar puntos débiles del adversario es el deporte nacional.
Aparecer inmaculado/a ante la sociedad no resulta fácil y hoy es imposible ocultar alguna faceta de tu pasado que resulta inconveniente. No sólo por asuntos de corrupción económica, también una antigua relación, cualquier exceso, una mínima falta, se convierten en armas arrojadizas que pueden fulminarte tras la batalla en redes sociales, medios afines o contrarios, tertulianos varios, etc.
Que se lo digan a Pedro Sánchez, a su mujer, a dos ministros caídos y una tercera en la picota, al líder de la oposición, a dirigentes podemitas…
En fin, así tiene que ser: luz y limpio currículum.