Algunos científicos contemplan la posibilidad de prolongar la vida hasta los 150 años frenando el envejecimiento celular. Ya se experimenta con ratones.
¡Si Malthus levantara la cabeza! Preguntaría si se pueden generar recursos para atender a la población resultante. Los “20 años no es nada” del tango se quedarían cortos, sería difícil vivir con tanto recuerdo acumulado y, lo peor de todo, cuando estuviéramos llegando al límite Artur Mas seguiría allí, imperturbable y estomagante, dándonos la matraca.
Ante ese panorama yo creo que sería preferible centrar las investigaciones en prevenir o curar las enfermedades cardiovasculares o cerebrales que tanto dolor y muerte causan.
Yo creo que sería más importante mejorar la calidad de vida a aumentarla. No digo que llegar a los 150 años sea malo, así lo mismo podríamos ver eventos importantes, pero mejor disfrutar de 80 años estupendos a 150 mediocres. Lo que pasa es que con tal longevidad seguro que recordaríamos batallitas y siempre diríamos «cualquier tiempo pasado fue mejor».
Manuel,me alegro mucho de tener noticias tuyas.Yo también creo que es preferible lo cualitativo frente a lo cuantitativo.Conforme vayas cumpliendo años verás el potente papel que juega la memoria haviéndonos viajar a momentos que creimos mejores.
Gracias por el comentario y un abrazo
Bien es cierto que lo más beneficioso para esta atolondrada sociedad no es una inmortalidad «ficticia».
Donde, a diferencia de tiempos pasados, la muerte queda lejos;
y ya bastantes quebraderos de cabeza tenemos con las injusticias cometidas por nosotros mismos y todo por unos trozos de papel que controlan nuestra vida e incluso las de otros seres. Luego hay otros dolores de cabeza menos importantes pero que también hartan a cualquiera, entre otros: el mismo discurso independentista de siempre de la derecha catalana para evadir el principal problema de nuestro país, la crisis.
En conclusión, si esto se lleva a la práctica, la plaga del ser humano seguirá creciendo y surgirán nuevas enfermedades para acabar con esta plaga y con la falta de recursos, como decía Thomas Malthus.
Un saludo de su hacker favorito y que disfrute lo que queda de verano, aunque desgraciadamente para usted y para los alumnos del IES Ibáñez Martín, va a disfrutar de unas prolongadas vacaciones.
Cuídese.
Muchas gracias por el comentario querido hacker.Es verdad que,desgraciadamente,estos cicateros burócratas que nos gobiernan me van a impedir seguir haciendo lo que más deseaba:dar clase.Mi mayor consuelo es pensar que dejo alumnos como tú,que haya podido influir favorablemente en vuestra vidas.
Un abrazo