NOS HUNDIMOS

 

Se podría hablar de varios tipos de caída y todos negativos pero el más literal es el hundimiento  de nuestra propia tierra como consecuencia de la sobreexplotación de acuíferos subterráneos (en el valle del Guadalentín, cien milímetros por año).

Que una actividad económica sea productiva y cree puestos de trabajo no es razón suficiente para que todo se supedite a ella como fin que justifica cualquier medio.

La agricultura intensiva y desmesurada envenena nuestro suelo, contamina nuestros mares y altera el medio ambiente pero nadie renuncia a nada. Algún día habrá que plantear el tema en serio.

Por otro lado, si el empresario gana un poco menos y pasa del Mercedes al Seat, si vemos en las calles menos emigrantes explotados miserablemente…pues tampoco es mal balance.

 

 

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