Másteres, falsos currículos, cremas faciales, pensiones y manadas nos han tenido distraídos del tema catalán durante unos días.
Pero no nos libramos de lo que ya parece una maldición que pesa sobre los españoles (tiene que ser cosa de magia porque la realidad no puede “alumbrar” un engendro con personajes como estos).
El tiempo corre en contra de los independentistas y, vistas las encuestas, no se arriesgarán a celebrar nuevas elecciones. Ya han estirado el proceso, provocado al Estado con candidatos imposibles e internacionalizado sus vergüenzas. Ahora toca ser pragmático- la pela es la pela- y presentar a Elsa Artadi como candidata; “más vale pájaro en mano que ciento volando”.
Así podrán seguir amargándonos la existencia. Esperemos que el gobierno haya aprendido la lección.