Pedro Sánchez encarna una nueva versión del “do ut des” romano, él da y todos los demás piden a cambio de su voto.
Los canarios con dinero se sienten menos aislados. Teruel existe, luego pide. PNV no es sólo mercenario, quiere grandes concesiones políticas, siempre peligrosas. ERC dice que ha doblegado al presidente y quiere amnistía para sus presos, un referéndum que ratifique el nuevo estatuto, etc. Bildu defiende a los suyos y desea una política carcelaria más laxa para los etarras. El inquieto cántabro tendrá que pagar por el apoyo que recibe en su feudo.
Los mayores beneficiarios son los de Podemos, culminan su sueño de formar parte de un ejecutivo, nombrarán muchos asesores y administran dinero público sin reparar en el incómodo déficit .
Y ante este panorama ¿qué hacer? ¿culpas a cada uno de ellos o al que les da todo lo que piden?