Acaba de venirse abajo el socorrido tópico de que madre no hay más que una. En Inglaterra se ha legalizado una técnica que permite formar un óvulo con ADN de dos mujeres.
Estamos ante un hecho relevante que solucionará problemas de fecundidad y enfermedades hereditarias en muchas parejas. Pone de manifiesto cómo la biotecnología va modificando nuestra visión tradicional sobre muchos temas.
Luego viene la reflexión ética acerca de la utilización que debemos hacer de estos descubrimientos y si procede fijar unos límites. Es un debate oportuno porque el progreso científico es imparable- no se pueden poner puertas al campo- y en sí mismo no es bueno ni malo, lo hemos de decidir nosotros.

Me parece crucial el debate acerca de cómo se articulan estos valores en un país, creo que trasciende al típico sobre Libertad-Seguridad. Pronto conduce a hablar del individuo y sus derechos y del Estado regulador y su tamaño.
Si lo fiamos todo al mercado desembocaremos en una sociedad injusta por desigual; si, por el contrario, lo estatalizamos todo aparecen la desmotivación y la pobreza.
Ya pasó en la Historia y ambos modelos fracasaron, dando lugar al Estado del Bienestar, que respeta el mercado pero garantiza derechos básicos (“mercancías al mercado, derechos al Estado”).
Ojalá los debates políticos que nos esperan ofrezcan soluciones sobre cómo conjugar libertad e igualdad en nuestra sociedad.

Hago esta reflexión viendo un programa en la 2 (no podía ser otra cadena) sobre la figura de Gregorio Marañón, ese gran médico humanista que enriquece nuestra Historia.
Considerando superado el tópico de las dos Españas (que no está claro) y evitando una visión parcial de lo que ocurrió (que no es fácil) creo que España sería mucho mejor si no hubiera padecido la Guerra Civil.
La II República engendró una generación brillantísima de políticos, literatos, científicos, maestros, médicos, etc, brutalmente interrumpida por un golpe de Estado que triunfó.
Los 40 años de franquismo fueron un paréntesis triste, mediocre, degradante (por no usar otros adjetivos).
Llevaba razón Unamuno, vencieron pero nunca convencerán.

¿“Qué coño es eso de la Udef”?, se preguntaba Pujol cuando lo entrevistaban acerca de su dudosa fortuna. Ahora seguro que sueña con las siglas de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal. La verdad es que esta sección especializada de la policía ha adquirido una fama increíble en los últimos años y hay que decir que desgraciadamente porque es debido al incremento de casos de corrupción que se descubren.
Se suben a un tranvía y “atropellan” a un desleal candidato, desgranan una granada putrefacta y se la sirven al juez en bandeja o imparten una asignatura de decencia en los cursos de formación andaluces.
La verdad es que contribuye a limpiar el panorama político.

En Sudáfrica una aplicación para móviles permite calcular- según peso, altura y edad de una mujer- el número de vacas que su familia ha de entregar como dote.
Es un modo curioso de cuantificar ese intercambio que se produce entre los novios antes de casarse y que presenta variaciones en las diferentes culturas aunque predomina el pago por parte de la familia de la mujer, una especie de “peaje” porque reducen gastos y la colocan en el mercado.
Complicada historia la de las relaciones hombre-mujer que, aún hoy, sigue siendo desigual y vejatoria para la mujer. Bueno sería acabar con las dotes y que todo transcurriera en un plano de igualdad.

Se dice que no es noticia que un perro muerda a un hombre sino que ocurra al revés, se resalta lo inusual.
Lo usual es que un perro se sacrifique por su amo; lo que ha ocurrido es que un niño de 8 años ha muerto queriendo salvar a su perro que había caído al mar. No pensó, no dudó, sintió que no podía perderlo y se lanzó al agua para rescatarlo.
¡Qué vínculo existiría entre ellos! ¡Cuántos juegos y caricias habrían compartido!
Los sentimientos en la infancia son fuertes y los vamos atemperando conforme crecemos y desarrollamos la razón.
Me imagino a los padres aturdidos, desolados, tal vez arrepentidos de haber regalado un perro a su hijo.

Es una palabra que se usa en el ámbito económico y hemos conocido ejemplos muy significativos. Si la extrapolamos al campo político nos aparece claramente el fenómeno Podemos. En un tiempo record se ha convertido en uno de los principales partidos, se nutre de votantes de IU (40%) y del PSOE (25%); su radiografía muestra un voto urbano, gente joven, con estudios, sin problemas económicos (excepto los parados), que se consideran de extrema izquierda (posiciones 1-2 de la escala CIS). Hay un claro anhelo de cambio profundo.
Lástima que no hayan encontrado líderes más creíbles, solventes y honestos. Pronto comprobaremos si sigue entrando aire en esa burbuja o, por el contrario, se desinfla y/o pincha.

Entre el ecuador y los 37º de latitud norte, entre los 10º de longitud oeste y los 80º este, en unos 18 países de dos continentes habita el terror que amenaza a la humanidad; financiado, armado, lleno de odio y crueldad, vive cobijado en una religión que practican 1.300 millones de personas.
Sólo se desactivará desde dentro, cuando la mayoría moderada, no integrista, lo quiera.
En nosotros la razón se fue abriendo camino, tuvimos el Renacimiento y la Ilustración, fuimos separando lo civil de lo religioso.
Ellos aún viven anclados en la fe y la madraza, organizan su sociedad desde un libro religioso, negando la andadura racional y el desarrollo cultural.
El proceso será lento y sangriento.

Por diversas circunstancias, a lo largo de la vida uno se va haciendo acreedor de ciertas distinciones o simples calificativos. Con el paso del tiempo logras mantenerlos, acrecentarlos o destrozarlos. Veamos algunos ejemplos:
¿Qué tiene de “ honorable” Jordi Pujol ahora que conocemos sus andanzas, en las que involucró a sus familiares; todos independentistas, todos ladrones?
Bien retirada está la dignidad del “ ducado” al codicioso e irreflexivo Urdangarín que forzó el relevo dinástico y casi consigue proclamar la III República.
¿Cómo se puede llamar “ cavaliere” al cerdo de Berlusconi?
¿Qué decir de un pedazo de carne (y silicona) con ojos, modelo de elegancia y finura intelectual, que se autotitula “escritora”?

Es un burdo mecanismo psicológico y político mediante el cual se intenta ocultar carencias e incompetencias.
Suelen recurrir a esta argucia los autócratas y/o dictadores; todos son víctimas de su propia campaña, siempre a medida.
Franco padeció una conspiración judeomasónica. Hugo Chávez no era mejor presidente por culpa de los norteamericanos, como Fidel Castro.
Ahora, Podemos- de quien menos cabía esperarlo- dice padecer la persecución de esa “casta” que teme su avance. Así que, si no quiere ser conspirador, repita: Errejón es un becario honesto; Monedero, un empresario modélico, roza la excelencia logrando un gran beneficio con una mínima inversión; Pablo Turrión factura y paga a sus empleados del mejor modo posible; Tania es una gran defensora de los valores individuales…