¿O esa expresión es un oxímoron? Un alcalde popular toledano responde ante una crítica de la portavoz socialista llamándola “puta”, además, “barata”, y, puestos a generalizar, llama “soplapollas” a todos los del PSOE.
Ahora que el PP habla de regeneración, nombra vicesecretarios que comuniquen mejor y pasea por T.V. portavoces más presentables debería reflexionar sobre el perfil medio de su militancia e impedir a toda costa que energúmenos como ese sean sus cargos públicos y/o orgánicos.
Contra estos personajes habría que dictar una orden de alejamiento de cualquier partido político. Sus motivos, pulsiones y actitudes son tan conocidos a lo largo de la Historia de España que dan miedo.
Es un secreto a voces que ningún partido político puede ir a ningún sitio con tanto docto ignorante y con tanto animal suelto.
Si es que los contrasentidos de la política hacen que el oximoron esté en su propia esencia.
La gran tragedia de los partidos( y por extensión,del panorama político) es que cada vez aparecen ante los ciudadanos como menos atractivos lo cual provoca que la gente «valiosa»,con cosas que decir y hacer,no se afilia creándose así un círculo vicioso.Se convierten en estructuras endogámicas y alejadas de la realidad.
Gracias por el comentario.