Difícilmente superable el que muestra Pablo Echenique, miembro de la troica de Podemos. Durante un año ha tenido un asistente al que pagaba 300 euros mensuales y no dio de alta en la Seguridad Social.
Lo peor es que quiere justificarlo culpando al modelo económico que, según él, empuja al paro y la precariedad; seguro que su sueldo le permite contratar a alguien en condiciones pero él prefirió la chapuza vergonzante.
Se suma a la lista de “debilidades-ilegalidades” que hemos ido conociendo en estos grandes detractores del Sistema, modelos puros de progresismo para quienes todo lo demás es “casta” superada y corrupta.
Luego les extraña que los ciudadanos, en la medida en que los conocen, vayan dejando de tomarlos en serio y votarlos.