El filósofo presocrático afirmaba que los números son el principio primordial de la constitución del Universo.
Ya pueden los separatistas proclamarse pitagóricos porque en ellos el número es también el origen de toda la miseria que nos hacen padecer. Si no tuvieran el número de diputados imprescindible para la mayoría absoluta y el enorme poder que eso significa en una democracia, no los conoceríamos, nada sabríamos acerca de su vida y milagros. Nos ahorraríamos la matraca diaria en los medios, que ocupan sus primeras páginas o imágenes con lo que ocurre en Cataluña; no nos informan de lo que pasa en Castilla, Extremadura o Galicia, todo el protagonismo y la proyección publicitaria es para el tema catalán.
Una buena ley electoral que no facilite la fragmentación parlamentaria acabaría con este problema, nos libraría de ellos.
¡Que alguien la haga, por caridad!
Unamuno dijo que los separatismos solo son resentimientos aldeanos, no los califico así, para mi siempre han sido catetos irrespetuosos y mal educados, eso si, ninguno renuncia a su nómina de fin de mes.
Acabo de ver «Amanece que no es poco» un pequeño homenaje a José Luis Cuerda, y francamente los plantaría a todos en la Plaza de Oriente, y los arrancaría cuando les crezca el respeto y la buena educación.
Claro que son ideologías de aldea, de sociedades cerradas.No sólo no renuncian a su nómina sino que se aseguran de cobrar las más altas del país.
Magnífica asociación de la genialidad de Cuerda para colocar a estos individuos en un lugar adecuado.