Aitzaz, un joven paquistaní de 15 años, impide que un terrorista suicida active sus bombas frenándolo con un abrazo y muere con él; evita una masacre entre sus compañeros.
Spozhmay, niña afgana de 10 años, enviada por su hermano talibán contra un puesto fronterizo, renuncia a ese “destino” y entrega su carga de bombas.
Pero estos actos heroicos no detendrán la locura; seguirán matándose entre ellos y a nosotros. ¿En nombre de qué causas justifican estas conductas?
Toda esta maldad no puede estar en nuestro código genético .¿Qué se ha hecho para adquirirla? .Y, sobre todo, ¿cómo se acaba con esta barbarie?