No es agradable hacer de Pepito Grillo desde un colectivo al que perteneces. Pero a cierta edad y con mucha experiencia a la espalda lo imperdonable sería permanecer callado ante lo que crees improcedente y negativo.
Hago este prólogo porque creo que el PSOE se equivoca en su política de pactos. Veo mal apoyar a una activista antisistema e independentista como Colau o recibir la ayuda de quien ha militado en ETA. Hay que mantener cierta dignidad. No se trata de esas expresiones tópicas de “cordones sanitarios” o “líneas rojas”, es simplemente no traicionar unos postulados esenciales.
Especialmente cuando se hace por mor de una voluntad cesarista de mantenerse en el poder y poco importan las siglas, los 140 años o las señas de identidad.
Nos informan estos días de las cifras que ha generado la violencia machista desde 2003. Lo más destacado es el hecho de que en 16 años han sido asesinadas 1000 mujeres; incluyendo lo autóctono y lo foráneo, que esta forma de barbarie nos iguala a todos.
Y lo terrible es que no se atisban posibles soluciones o medidas que disminuyan el fenómeno. Ya se inculca la igualdad en el proceso educativo, hay juzgados especializados y leyes severas que se aplican. Pero el goteo de muertes no cesa, se mantiene con pocas diferencias interanuales.
Parece que no cabe más que una especie de estoica resignación, que tenemos que aceptarlo como parte integrante de la estructura de nuestra sociedad, como consecuencia lógica de algo. Hay coches y accidentes de tráfico; hay hombres y mujeres asesinadas por ellos. ¿No es desolador?
Avanzamos hacia la normalidad y ya tenemos nueva Asamblea Regional. Su presidente, de Cs, es nuevo en estas lides; parece que hasta hace poco se postulaba ante el PP y los pactos lo han favorecido (supongo que con gran cabreo de otros militantes de Cs más significados).
Lo primero que proclama, ufano, es que “hemos conseguido que la Asamblea no sea presidida por el bipartidismo”, como si hubiera sido mérito suyo y dando por hecho que el bipartidismo es perverso en sí mismo.
Le debe parecer bien el papelón que ha desempeñado su partido en el proceso de gestación y la confusión que siembra entre sus votantes.
Ahora le toca demostrar que estará a la altura de sus predecesores y sabrá desenvolverse con eficacia en un campo de juego complicado y con un Gobierno que tampoco será modelo de homogeneidad y paz interior.
Tras un espectáculo grotesco de declaraciones contradictorias, rectificaciones, matizaciones y otros “ones”, se constituyen los Parlamentos Autónomos, se produce el ansiado alumbramiento y ha ocurrido lo que cabía esperar: han sido trillizos con acento andaluz. PP-Cs y VOX se ponen de acuerdo y muestran un anticipo de lo que serán las presidencias de algunas Comunidades.
Sería más razonable y políticamente correcto un sano entendimiento PSOE-Cs, sin dejar de competir entre ellos por ese jugoso bocado que es el centro izquierda sociológico español.
Pero desde que Iván Redondo dio la consigna de explotar la célebre foto de la Plaza de Colón y hablar de las tres derechas, el trifachito y otras monerías, el PSOE ha arrinconado a Cs sin dejarle otra opción que el cobijo en el tripartito. Aunque veremos algún desmarque esporádico.
El petróleo corre por las arterias del planeta alimentando el transporte y la industria. Pero casi todo en él es negativo: ha fortalecido el poder del mundo islámico, es el gran responsable de las emisiones de CO2 con su catarata de consecuencias nocivas y a veces es vertido al mar provocando las temibles mareas negras, como la del Prestige.
También contamina a gobiernos de países que han creado empresas estatales para su explotación. En Brasil fue Petrobras que durante quince años regó de corrupción a muchos políticos, habiendo acabado en la cárcel un presidente y su vicepresidenta. En Venezuela Chávez creó PDVSA, gigantesca fuente de corrupción para militares y dirigentes, con Cabello y Maduro a la cabeza. Ha salpicado al exembajador español Raúl Morodo y hay quien sospecha que puede manchar a otro “ex” de mayor rango.
Todo el que haya seguido las discusiones sobre el Brexit en el Parlamento británico recordará que era la palabra favorita del presidente de la Cámara, del speaker. No hay sesión en la que no se vea obligado a pronunciarla, a berrearla. Sería un magnífico pastor de ovejas y podría controlarlas sin ayuda de perros.
La verdad es que le toca bregar con un ganado difícil porque los diputados han mostrado al mundo su desconcierto, sus contradicciones y su inconsistencia (cuando por aquí la democracia era sólo un sueño nos parecían modélicos, los envidiábamos).
La fiesta no ha terminado, vendrán más días de gloria. La pobre Theresa May tira la toalla y se va desconsolada.
La Cámara de los Comunes seguirá agitada y su presidente chillando :¡order! También deberían de poner orden en sus ideas.
El Capitán General de las Fuerzas Armadas se bate en retirada.
El rey Juan Carlos con 81 años quiere dar paso a una nueva fase de su vida, que, por “imperativo vital, no será muy larga.
Su imagen nos ha acompañado en tantos momentos y espacios que nos resulta familiar. Tras 39 años de reinado el balance es históricamente positivo, ensombrecido al final por infidelidades y devaneos amorosos propios de monarquías de otras épocas.
Si la empatía es una virtud, tiene más que nadie porque inmediatamente conecta y sintoniza con su interlocutor. Entendió bien el momento político que le tocaba protagonizar y supo adaptarse a las circunstancias, propiciando que el pueblo español realizara una Transición modélica.
Que disfrute de la nueva etapa (es un bon vivant) y queden los juicios acres y biliosos para los echeniques ponzoñosos que en el mundo son.
Algunas noticias se prestan a valoraciones diversas, desde lo banal a lo trascendental. Por ejemplo: el PSOE presta cinco senadores a Podemos para que pueden formar su propio grupo y cobrar 729.600 euros; en cuanto lo hagan vuelven a sus siglas de origen.
Puedes tomarlo como una simple práctica parlamentaria sin importancia o puedes considerarlo un auténtico desastre porque devalúa la imagen del senador y del Senado. Nuestra Cámara Alta lleva 42 años mostrándonos su inutilidad (la aplicación del 155 no salva esa valoración).
Esperemos que el nuevo presidente, Manuel Cruz, haga gala de su condición de filósofo, reflexione críticamente y adopte medidas para convertirlo por fin en una Cámara de representación territorial, el foro idóneo del debate autonómico donde se encauce el diálogo sobre las pretensiones nacionalistas. Tiene mayoría suficiente para llevarlo a cabo y temas no faltan.
Las elecciones y los subsiguientes pactos han creado un escenario complejo y poco grato.
Allí ha ganado Suma Navarra con 20 diputados (sobre 50), mostrando la eficacia de la unión del centro derecha. El PSOE es segunda fuerza con 11 escaños, pero su secretaria quiere ser presidenta para coronar su currículum lleno de cargos públicos desde que se afilió a las Juventudes.
Para ello necesita el apoyo de Podemos, Ezkerra y Eta-Bildu y a ese engendro lo llama gobierno de progreso (el papel lo aguanta todo).
Sólo se puede impedir desde Madrid. El dilema para Pedro Sánchez es crucial: o frena en seco el irresponsable deseo de gobernar de Chivite o entrega esa Comunidad para que el independentismo vaya ampliando su mapa en España.
No es ningún desatino dejar que gobierne la lista más votada y no se puede gobernar a cualquier precio.
Lo de ser “optimista antropológico” suena bonito aunque sólo sea una cursilada. Es más efectivo analizar si hay motivos para sentirse así. Un análisis rápido de lo que podemos llamar “macropolítica” parece que conduciría al pesimismo.
El Gobierno es rehén de los peores enemigos de un Sistema democrático: un populismo impregnado de izquierdismo trasnochado y unos partidos separatistas cada vez más fuertes y agresivos que tensan al Estado.
Los otros partidos viven enzarzados en disputas interesadas y endogámicas que van más allá de la discrepancia y el debate propios de una democracia.
Cada día estoy más convencido de que en España resulta imposible una gran coalición de los tres partidos netamente constitucionalistas (el porqué es un enigma). Pero no renuncio a decirlo porque también estoy convencido de que sería una buena solución si se gestionara con racionalidad y nobleza.
El Blog pretende ser un espacio abierto a la reflexión interactiva, propiciar un intercambio de puntos de vista, de valoraciones. La temática es abierta, pluridisciplinar y combina microartículos (en torno a 100 palabras) con otros más extensos.